Casi 26 años han pasado desde que comencé mi andadura profesional en el Colegio de Gestores Administrativos de Cantabria y la evolución de la profesión no ha podido ser más meteórica. Recuerdo cuando en los años 90 nos limitábamos en el Colegio a vender impresos para realizar gestiones presenciales en Tráfico y actualmente, es el propio Colegio quien imprime en su sede, los permisos de circulación de esas tramitaciones una vez visados por el personal colegial, algo impensable entonces.
La firma de convenios de colaboración en régimen de encomienda de gestión por parte del Consejo General, supuso un despegue de nuestra marca gA que ha sabido adelantarse, reinventarse y adaptarse a los ritmos de crecimiento y transformación de la sociedad española y de las Administraciones Públicas, ayudando a éstas a convertir trámites que eran laboriosos e incluso tediosos, en gestiones que pueden quedar realizadas en pocos minutos desde los despachos de los gestores, convirtiendo nuestra profesión en su más eficaz colaborador. Todos estos logros no se hubiesen conseguido sin el arduo trabajo del Consejo General que, a día de hoy, continúa desarrollando una labor encomiable que estos últimos meses se ha visto plasmada en la firma de numerosos convenios de colaboración con distintas administraciones autonómicas, que facilitan aún más, el día a día de nuestros colegiados y que suponen un plus para los futuros nuevos gestores.
Desconozco cuál es la clave del éxito de un buen despacho profesional pero si algún día me aventurase a ejercer la profesión, primaría la formación del equipo humano, la especialización en determinadas materias, la excelencia en el trato al cliente, la máxima calidad del servicio y la colaboración con otros compañeros, creando sinergias, práctica que actualmente observo comienza a fomentarse entre nuestros colegiados jóvenes y que considero, especialmente positiva y necesaria. Por fin, comienzo a ver como se elimina esa brecha generacional que ha existido siempre en nuestra profesión marcada por unos años donde no se convocaron pruebas de acceso a la profesión, desapareciendo esa visión de compañero «competencia» por «compañero colaborador».
De cara al futuro, nos tocará seguir demostrando nuestra capacidad de adaptación continua a los cambios normativos que casi a diario debemos afrontar, continuar trabajando arduamente en la potenciación de nuestra imagen de marca gA, clave en la diferenciación y sello de garantía profesional que identifica a más de 6000 despachos profesionales multidisciplinares repartidos a lo largo de todo el territorio nacional, multiplicar y posicionar nuestra presencia en las RRSS y prestar un servicio de excelencia a los ciudadanos. Con todos estos retos y con el apoyo imprescindible del Consejo General y del Colegio, el futuro de los gestores administrativos está más que justificado y garantizado.
Dicho futuro debemos comenzar a escribirle ya, y como siempre digo a mis colegiados, debemos sentarnos a recapacitar, hacer autocrítica y pensar cómo podemos articular todos esos objetivos que tenemos marcados, trabajando con probidad, honradez y diligencia que es la base de un correcto ejercicio profesional. Y para ello, desde el Colegio debemos continuar transmitiendo que además de ser una entidad de vertebración social, somo su mejor apoyo; debemos seguir cumpliendo nuestros principales objetivos como son la ordenación del ejercicio profesional, la defensa de sus intereses, la protección de los intereses de los ciudadanos así como la representación institucional de la profesión y además, hacerles ver que somos un equipo, que ellos son nuestra razón de existir y sin unión y trabajo por un objetivo común, no hay fuerza de equipo, luego no hacemos profesión. Cuantos más colegiados seamos, más colaboraremos, más compartamos y más nos apoyemos unos a otros, mayores serán los logros que consigamos en un futuro no muy lejano
Lorena Prieto Sancibrián
Gerente del Colegio Oficial de Gestores Administrativos de Cantabria
